Tutorial paso a paso
Parece que últimamente está de moda utilizar contenedores marítimos reciclados como viviendas, oficinas… ¡o piscinas!
Utilizar un contenedor industrial como piscina es una gran solución, ya que éstos están compuestos de un material robusto y duradero. A partir de ahí, ¡lo que se te ocurra! Puedes enterrarla, añadirle un revestimiento de madera, unas escaleras, incorporarle un jacuzzi o un sistema de calefacción para el agua.
¿Por qué un contenedor marítimo?
Los contenedores son robustos y duraderos, diseñados para soportar toneladas de peso y las inclemencias del transporte marítimo. Esto los hace ideales para contener el agua de una piscina y resistir el uso continuo de productos como el cloro. Además, su estructura única facilita una instalación rápida sin necesidad de modificaciones.
Resistencia de los contenedores
Como ya hemos dicho, los contenedores marítimos están compuestos por materiales muy resistentes, ya que están hechos para soportar varias toneladas de peso. Es un elemento ideal para aguantar el peso del agua que vamos a utilizar para convertirlo en piscina. Además, estos materiales soportan el uso del cloro u otros materiales que se utilizan para su limpieza y mantenimiento.
Instalación rápida y fácil
Un contenedor es una pieza única que no necesita ser modificada. Hay grandes camiones que se encargan del transporte de estos contenedores, así que, tanto el traslado, como la instalación serían algo fácil y rápido de realizar.
El contenedor marítimo puede quedar muy bien tal cual en el jardín pero, si queremos darle un «toque», tenemos diferentes opciones. La primera de ellas, es enterrarlo. Nos ahorraremos, tanto el precio como el engorro que supone instalar una piscina de obra y nos quedará genial como piscina prefabricada. Si preferimos dejarla al aire, podemos ponerle un revestimiento de madera o de cualquier otro material para darle estilo a nuestra piscina.
Sostenibilidad
Reciclar cualquier cosa siempre es sinónimo de sostenibilidad, así que, aprovechar un contenedor que, en su momento fue utilizado para transportar mercancía ayudará a preservar el medio ambiente y le dará una segunda vida al contenedor.
También podremos utilizar otros elementos reciclados como accesorios para nuestra piscina
Personalización y estética
Puedes personalizar tu piscina de contenedor de varias maneras:
- Enterrada: Para una apariencia similar a las piscinas tradicionales y un ahorro significativo en comparación con las piscinas de obra.
- Con revestimientos: Añadir madera u otros materiales al exterior para integrarla estéticamente en tu jardín.
- Con extras: Como escaleras para un acceso fácil, jacuzzis integrados o sistemas de calefacción para disfrutarla todo el año.
Paso a paso para construir tu piscina con un contenedor
Este elemento no necesita instalación y es muy fácil colocarlo en el jardín. Eso sí, necesitas un jardín relativamente grande, ¡no cabe en una terraza!
Los contenedores tienen una medida estándar, así que la piscina tendrá las dimensiones que pueda tener el contenedor. Una alternativa, para la gente con un jardín enorme, es utilizar dos contenedores juntos.
Colocar una piscina de contenedor en tu jardín es sorprendentemente sencillo. Solo necesitas un espacio suficientemente grande, ya que los contenedores tienen medidas estándar. Para jardines más grandes, incluso podrías considerar combinar dos contenedores para una piscina más amplia.
Conclusiones
La tendencia de reciclar contenedores marítimos para usos como viviendas y oficinas ha dado paso a una innovación igualmente impresionante: ¡convertirlos en piscinas! Esta solución no solo es creativa, sino también sostenible y eficiente. Esperamos que te haya resultado interesante nuestra explicación y que te pongas manos a la obra con el proyecto de construir tu propia piscina en contenedor.